Guatemala, 15 de julio.- Guatemala emprende con buenas expectativas la tendencia de la construcción sostenible, cuya presencia en el mercado aumenta por el menor impacto ambiental y el ahorro en la edificación y mantenimiento del inmueble, afirmó José Pablo Labbé, presidente de la entidad privada Guatemala Green Building (GGB).

México, con unos 320 proyectos certificados, domina en la región, mientras que Guatemala comienza a figurar en Centroamérica en la corriente de la construcción sostenible, luego de Costa Rica y Panamá, indicó el especialista en una exposición patrocinada por el Banco Agromercantil (BAM).

Las construcciones sostenibles se ostentan como tales, tras conseguir las certificaciones internacionales denominadas LEED que en sus cuatro modalidades (Básica, Plata, Oro y Platinum) premian las buenas prácticas con menor impacto en el entorno.

Según datos del sector, Guatemala entró en el proceso de certificación de construcciones sostenibles al registrarse en el 2005 y recién en el 2012 consiguió el primer proyecto certificado. En la actualidad se cuenta con un total de 20 construcciones aprobadas (que equivalen a 120 mil metros cuadrados de construcción).

Las certificaciones, explicó el presidente de (GGB), se aplican desde el proceso de diseño hasta la construcción de edificios de apartamentos, de oficinas, residencias, centros comerciales, entre otras edificaciones, así como en renovaciones.

Los llamados “edificios verdes pueden reducir el uso de energía (entre un 24 y 50 por ciento), la emisión de CO2 (33 a 39 por ciento), el uso de agua (hasta en 40 por ciento) y los desechos sólidos (70 por ciento)”, destacó Labbé en el evento convocado por el BAM al citar resultados de un reciente estudio internacional.