Filadelfia. – Seis policías resultaron heridos tras ser atacados con un arma de fuego en la ciudad de Filadelfia. El tirador era una persona afroamericana y ya fue detenido, mientras que su complica se mantiene resistiéndose de la policía y se encuentra escondido con dos personas como rehenes según los informes de la policía local.

Medios estadounidenses aseguran que los rehenes son policías que ingresaron al edificio para detener al agresor y fueron amenazados por el atacante, pero esto no ha sido confirmado por las autoridades.

El tiroteo inició después de recibir varias alertas a través de la línea de emergencia 911 acerca de posibles situaciones ilícitas que se llevaban a cabo en el sector de Nicetown-Tioga, al norte de Filadelfia. Debido a su cercanía, la Universidad Temple, decidió cerrar el campus de medicina para proteger a sus estudiantes de cualquier riesgo. Las autoridades también clausuraron momentáneamente ciertas calles de la ciudad.

La Casa Blanca se manifestó a través de un comunicado en donde afirman que el presidente Donald Trump se mantiene al tanto de los hechos y “continúa monitoreando la situación”.

Por su parte el gobernador de Pensilvania, Tom Wolf, publicó a través de su cuenta de Twitter un mensaje donde afirmaba «Monitoreo la situación de los tiradores en el norte de Filadelfia y he ofrecido apoyo a la policía local. Rezo por la recuperación de los agentes de policía que resultaron heridos en el cumplimiento del deber y por la seguridad de los que respondieron a este incidente».

El comisionado de la policía de Filadelfia, Richard Ross informó que los oficiales están tratando de abrir una línea de dialogo con el tirador, pidiéndole que se rinde y evite que salgan más heridos de esta situación, sin embargo, no han recibido respuesta del atacante.