Estados Unidos. – En una operación conjunta, el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha confirmado la detención de Ismael Mario Zambada García, conocido como “El Mayo”, y Joaquín Guzmán López, hijo del famoso narcotraficante Joaquín «El Chapo» Guzmán. Ambos fueron arrestados en Texas y se encuentran actualmente bajo custodia de las autoridades estadounidenses.

“El Mayo” Zambada, uno de los líderes históricos del Cártel de Sinaloa, y Guzmán López, quien desempeñaba un papel significativo en la organización criminal, enfrentan múltiples cargos relacionados con el liderazgo de operaciones del cártel, incluyendo la fabricación y tráfico de fentanilo. Según el comunicado del Departamento de Justicia, los dos narcotraficantes volaron a Estados Unidos, aunque los detalles de sus detenciones aún no han sido esclarecidos.

Zambada, considerado por expertos como uno de los capos de la droga más influyentes del mundo, ha evadido a las autoridades durante décadas, lo que ha generado sorpresa y conmoción en México tras su arresto. Fundador del Cártel de Sinaloa junto a “El Chapo” Guzmán, quien cumple una condena en una prisión de máxima seguridad en EE.UU., Zambada enfrenta numerosas acusaciones por delitos de crimen organizado y tráfico de drogas.

DEA

El Departamento de Estado de EE.UU. informó que Zambada posee varios negocios legítimos en México, incluidos una gran empresa lechera, una línea de autobuses, un hotel y activos inmobiliarios. Además, en febrero, la Fiscalía estadounidense lo acusó de conspiración para fabricar y distribuir fentanilo, una droga que se ha convertido en la principal causa de muerte entre ciudadanos estadounidenses de entre 18 y 45 años.

En su ficha de la DEA, Zambada era catalogado como fugitivo “armado y peligroso” y se ofrecía una recompensa de hasta 15 millones de dólares por información que condujera a su captura. Los delitos que se le imputan abarcan desde tráfico de cocaína y marihuana hasta lavado de dinero, secuestro y asesinato.

Joaquín Guzmán López, miembro de “Los Chapitos”, una célula formada por los hijos de “El Chapo”, es hermano de Ovidio Guzmán López, extraditado a EE.UU. en enero pasado. “Los Chapitos” asumieron el control de una facción del cártel tras la extradición de su padre en 2017 y son considerados unos de los mayores exportadores de fentanilo a Estados Unidos.

ICE

Los medios mexicanos han señalado que Joaquín y Ovidio Guzmán son hermanos de Griselda y Édgar Guzmán, este último abatido presuntamente por miembros del cártel de los Beltrán Leyva. La reputación de los hermanos Guzmán los describe como jóvenes violentos y carentes de las habilidades estratégicas de su padre.

“El Chapo” tuvo diez hijos con tres mujeres: Alejandrina Salazar, Griselda López y Emma Coronel. Aunque no todos sus hijos están en el ojo público, algunos, como “Los Chapitos”, han sido vinculados a actividades criminales. En el pasado, se ha reportado que estos se disputaban el control de la organización con “El Mayo” Zambada.

La detención de estos dos líderes del Cártel de Sinaloa marca un golpe significativo en la lucha contra el narcotráfico y subraya el continuo esfuerzo de las autoridades estadounidenses para desmantelar las operaciones de una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo.